lunes, 21 de noviembre de 2011

...sorbo en sorbo...

Los días son soplos de vida inexactos que claman por una taza de café a cada nuevo amanecer cuando despierta la ironía enredándose de sencillez matutina en mis pasos.

Luego espero por un deleite, un instante que carcoma la esencia de mi vida y me lleve a buscar sin exilio distracciones y contrariedades de la existencia donde tropezararé con caricias.

Deambulo hipnotizado, con la mirada fija en un pavimento de ideas, descuidando los instantes y los tropiezos, respirando incertidumbres (vida sin vida), acariciar la oz de la muerte acurrucada en mi taza y detenerme antes del último sorbo...

viernes, 18 de noviembre de 2011

...Despertar...

Ayer desperté repleto de felicidad
evitando se colaran en la rutina
aquellos momentos que disipan la alegría.

Mas no pude y el paso hacia la tristeza fue inevitable
mientras centenares de ideas atormentaban mi desdichada cabeza.

Encierro latidos inciertos
derribo conexiones neuronales
asesino y destierro pensamientos como un tirano.

Ayer desperté repleto de felicidad
cuestionando mis latidos y respiros
deambulando en los rincones de mi cuarto
desatando a mis demonios prisioneros
y que me enseñaran el camino de vuelta.

Mas no pude continuar
los muros me cerraron el paso
y los demonios se perdieron
acrecentando la desdicha de mis pasos perdidos
en ese limbo feliz que encuentro en cada parpadeo.

Ante ayer desperté frío e insensible
destinado a morder los caminos
para encontrar sabor en la nada,
mi mente me enseña a esquivar trampas.

Ante ayer desperté triste y solo
acompañado de mis criaturas,
amores del pasado,
torturas incompletas,
círculos mal cerrados,
pensamientos mal paridos,
y piedras que en el suelo me acariciaban.

El frío me atormentó,
las voces cantaron a coro la miseria de mi existencia,
y recuerdo que luego de tanto
al final del día sonreí, ayer lloré.

Hoy solo desperté...




viernes, 11 de noviembre de 2011

Realidad

Tomo una taza de café mientras me golpea la incertidumbre, luego de despertar y fumar (síntoma inéquivoco de vicio) me fumo otro solo para dejar que el tiempo resbale por mi garganta con el primer sorbo de ese expresso doble sin azúcar que intentará despabilar el sueño acumulado en noches de estúpido desvelo. Doblo una hoja, una carta, una pausa en mi existencia, una sensación, unas palabras que señalan el final inevitable de una historia. Una sensación de aburrimiento me invade. Si ya sé que fue mi culpa, tantas veces escuché los reproches, las quejas, hasta creí que se iría antes, pero se fue ahora, en este momento llevándose todas las piezas  de su vida dejándo tras de sí únicamente esta inútil carta que trata de explicar con elocuente lucidez la necesidad de su búsqueda de nuevos horizontes, el perdón sincero de una dama que busca sentir el viento acariciándole el rostro, las disculpas por buscar caminos sin fronteras... Está bien, ya sabía que partirías, no era novedad para nadie, todos los seres solitarios que estamos reunidos en este cuerpo lamentaremos algún día tu partida, estábamos enamorados de ti, pero no de una carta, entonces parece más un instante silencioso que ahora al despertar y te veo acostada en esa cama, no hubo emoción, el sueño al final hubiera prefirido fuera la realidd...

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Recuerdo propio

Caminar rodeado de pensamientos, tropezarme con ideas y perderlas en el trayecto al suelo. Cuestionar la razón de mi existencia, continuar señalando mis brevísimas historias y desconocer (a propósito) al protagonista de tan bajas inclinaciones, de tan banales entretenimientos. Acciones estúpidas, comentarios absurdos, delirios y persecusiones inexistentes. Así han sido mis días, así han sido mis noches, por ello las ojeras abarcan terreno en mi rostro, por ello mis ojos deambulan estrepitosos por la órbita de mi cabeza, por ello soy vagabundo silencioso en el abrazo frío de mi tierna, sutil y enamorada locura.